Nos han llegado varias consultas últimamente a FQS Battery, pidiéndonos asistencia cuando la batería que han comprado recientemente para su coche, ha fallado. Pero ojo, hablamos de baterías de segunda mano. Y bueno, no vamos a decir que no estemos sorprendidos de que nos pregunten que como pueden reclamar, pero es que una batería de segunda mano puede implicar múltiples problemas. Vamos a analizar en este artículo diferentes por menores que implican la decisión de poner un elemento prioritario como es la batería para tu vehículo, de segunda mano.
Cuando la batería del coche empieza a fallar, la primera opción que viene a la mente es comprar una nueva. Pero en ocasiones se busca una opción más económica. Ahí es donde entran las baterías de segunda mano y/o reacondicionadas. Pero, ¿realmente vale la pena comprar una batería usada? Veamos los pros, los contras y en qué casos podría ser recomendable.
¿Qué es una batería reacondicionada?
Una batería de coche reacondicionada es aquella que ha sido restaurada para recuperar parte de su capacidad original. Esto puede incluir la limpieza de los bornes, la reposición del electrolito y la carga. Estas baterías suelen venderse a un precio menor que una nueva.

¿Qué es una batería de segunda mano sin reacondicionar?
Son aquellas baterías que están a la venta en diferentes plataformas digitales donde se compran y venden productos usados. Y que en muchas ocasiones no son reacondicionadas. Simplemente se han desinstalado de un vehículo y se ha puesto a la venta. A lo sumo se le ha pasado un paño para limpiar su aspecto exterior. Pero ni se ha realizado una comprobación previa de su estado ni se ha producido una recarga. Entre usuarios, la garantía es nula o inexistente.
Ventajas de Comprar una batería de segunda mano
- Precio más bajo: Una batería reacondicionada puede costar entre un 30% y 50% menos que una nueva.
Desventajas y riesgos de comprar una batería de segunda mano
- Vida útil reducida: Aunque reacondicionada, una batería usada ya ha perdido parte de su capacidad original, por lo que su duración será menor que una nueva.
- Garantía limitada o inexistente: Algunas tiendas ofrecen garantía, pero suele ser mucho más corta que la de una batería nueva.
- Riesgo de fallos inesperados: Al no ser completamente nueva, podría fallar en cualquier momento sin previo aviso.
- Calidad variable: No todas las baterías reacondicionadas pasan por un proceso adecuado de restauración, lo que puede afectar su rendimiento.
- Segunda mano: las baterías a la venta de segunda mano que no son reacondicionadas, todavía ofrecen menos garantías, duración y rendimiento que las baterías reacondicionadas.
- Ahorro aparente: Aunque inicialmente puede parecer una opción más barata, su corta duración y el riesgo de averías adicionales pueden hacer que el ahorro sea insignificante o incluso costoso.
- Mayor probabilidad de fallos en condiciones extremas: Las baterías usadas son más propensas a fallar en situaciones de frío intenso o calor extremo, aumentando el riesgo de quedarse sin energía en el peor momento.

¿En qué casos vale la pena comprar una batería de segunda mano
Comprar una batería de segunda mano podría ser recomendable en los siguientes casos:
LO LAMENTAMOS, DESDE FQS BATTERY NO ENCONTRAMOS NINGUNA SITUACIÓN EN LA QUE LA ELECCIÓN DE UNA BATERÍA DE SEGUNDA MANO REACONDICIONADA O NO MEREZCA LA PENA.

Motivos
Aunque pueda existir un ahorro económico comprando una batería de segunda mano respecto a una batería nueva, desde su corta duración hasta las averías que puede llegar a causar, hacen que el ahorro real sea insignificante o que incluso nos cause una avería muy cara de solucionar.
Además de que las probabilidades de que falle en los momentos más necesarios o de condiciones térmicas más complejas es infinitamente superior a las probabilidades de fallo respecto a una batería nueva.
CONCLUSIÓN
Las baterías de segunda mano pueden ser una alternativa, pero son una opción totalmente desaconsejable en todos los casos. Si buscas una batería, lo mejor siempre será invertir en una batería nueva.